Refinería de Dos Bocas
Se están acometiendo los trabajos de la que será la mayor refinería de petróleo de México, la refinería de Dos Bocas. La construcción dio comienzo en 2019, en un emplazamiento de 566 hectáreas en la región sudoeste de Tabasco. Cuando haya finalizado la obra, la refinería de Dos Bocas supondrá un punto de inflexión en la independencia energética a largo plazo de México. La refinería estará dotada de 17 unidades de procesado, que serán capaces de refinar 340 000 barriles de petróleo crudo al día, con lo que México logrará ser autosuficiente en el refinado de petróleo.
La empresa estatal de petróleo y gas de México, Petróleos Mexicanos (PEMEX), está supervisando el proyecto, que forma parte fundamental de las iniciativas del país por dejar de importar petróleo crudo para 2023. Dos Bocas, que actualmente importa una cantidad importante de su petróleo de los Estados Unidos y Arabia Saudí, podrá atender un aumento del consumo de crudo nacional de hasta un tercio de los niveles actuales, con lo que se convertirá en una fuente de petróleo refinado de una importancia estratégica vital.
Retos de producción
La refinería, cuya conclusión estaba prevista en un principio para 2022, ha afrontado dificultades que han supuesto un incremento significativo de los costes y han retrasado la finalización hasta 2023. En el período de 18 meses desde el inicio del proyecto, el peso mexicano se ha devaluado, con lo que se han incrementado muchos de los costes del proyecto. Ahora, con la subida de los costes de la importación de acero desde el extranjero, las empresas nacionales de producción de acero tienen una ventaja competitiva a la hora de conseguir contratos y suministrar a Dos Bocas acero obtenido de forma rentable.
La perspectiva financiera cambiante ha presionado a PEMEX para que tome medidas que garanticen que Dos Bocas se pueda terminar según lo previsto. La empresa de producción de petróleo, respaldada por el Estado, hace frente a unas deudas cada vez mayores. La previsión inicial del coste de Dos Bocas ha aumentado de los 8900 millones de dólares a una estimación de 12 400 millones de dólares, lo que ha obligado a PEMEX a buscar vías alternativas para terminar el proyecto. El nuevo planteamiento cuenta con la intervención del contratista de larga data de PEMEX, ICA Fluor, para supervisar las fases restantes de la obra.
Además de las presiones económicas, la refinería de Dos Bocas ha afrontado sus propios desafíos durante el proceso de construcción. Mientras que los costes cada vez mayores de la obra han obligado a cambiar el enfoque de subcontratación de proveedores, el proyecto también ha sufrido varios retrasos debidos a problemas de producción. Unas fuertes lluvias, atípicas en la temporada, provocaron la subida de fuentes de agua cercanas, lo que propició la inundación de la planta, retrasos en los trabajos y daños en más de una ocasión.
Demostrar los conocimientos técnicos adecuados
Aunque la refinería de Dos Bocas ha afrontado dificultades durante su construcción, la búsqueda de nuevos proveedores con los conocimientos técnicos adecuados para el proyecto presenta oportunidades para que los productores locales participen en este proyecto vital a escala nacional. Para que los proyectos energéticos de gran magnitud salgan adelante, se requiere la participación de proveedores con experiencia y los conocimientos técnicos adecuados. Si tu organización los tiene, podrías presentarte a las licitaciones de la refinería de Dos Bocas.
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